Hoy en día, 4 de cada 10 parejas tienen problemas para concebir un hijo. Cuando se trata de parejas mayores de 35 años, la cifra empeora.
Hay muchos factores que afectan a la infertilidad, tales como:
• Mala nutrición
• Vivir en un estado de estrés constante.
• Toxinas ambientales que interfieren en las hormonas.
• Edad tardía que complica concebir.
Muchas veces las parejas deciden acudir a agresivos tratamientos médicos, que nos llenan de hormonas y desajustes. En general, la tasa de embarazo por ciclo de Inseminación Artificial oscila alrededor del 15% con una tasa acumulada alrededor del 45% después de cuatro intentos. Dejando a las mujeres que no lo consiguen, machacadas física y psicológicamente. Con varios kilos de más, sensación de hinchazón del abdomen y del pecho, fatiga, retención de líquidos, dolores… multitud de sensaciones físicas que se aúnan al profundo abatimiento que nos dejan los intentos fallidos.
Pero lo que mucha gente no sabe, es que hay toda una serie de tratamientos naturales que nos pueden hacer disfrutar del proceso de concebir, con un porcentaje de éxito nada desdeñable.
Para comenzar es importantísimo mantener unos buenos hábitos alimenticios para favorecer la gestación. No se aconsejan los alimentos elaborados con harinas refinadas ya que pueden inferir en la ovulación. Hay que optar por la comida con alto contenido en antioxidantes como las frutas y verduras, el ácido fólico como los cereales y los ácidos grasos omega-3 como el pescado azul. También debemos prestar atención a las bebidas con cafeína, y evitarlas; en general todos aquellos hábitos que nos ayuden a estar relajados y en sincronía con nosotros mismos jugarán a nuestro favor. Hábitos que son importantes tanto para la futura madre como para el futuro padre, ¡esto es cosa de dos!
Hay en concreto dos tipos de terapias naturales que tiene un buen porcentaje de éxito en la fertilidad, son la homeopatía y la acupuntura.
La homeopatía tiene mucho éxito con problemas de fertilidad tanto en la mujer como en el hombre. Es un sistema de conocimientos médicos que busca estimular la curación del organismo a través de compuestos naturales, centrándose en tratar la causa de la enfermedad. Esta medicina natural acepta y reconoce la capacidad inherente del organismo para equilibrarse, aprovechando su propia naturaleza curativa, siguiendo la ley de la similitud: lo similar cura lo similar. Trata al paciente teniendo en cuenta tanto el plano emocional como el físico, y sobre todo, la personalidad del paciente. Algo similar ocurre en el caso de la infertilidad, ya que cada pareja es diferente y esto la homeopatía lo tiene en cuenta. Adaptando cada tratamiento a las peculiaridades de los futuros padres. Existen decenas de compuestos que mejoran la fertilidad, pero sólo un profesional en la materia os aconsejará el que mejor se adapte a vuestro caso.
La acupuntura es una técnica que también busca estimular la capacidad natural del cuerpo para curarse. Se realiza mediante la inserción de agujas en puntos de acupuntura específicos. Es la técnica más extendida de la Medicina Tradicional China, que también comprende otras técnicas como utilizar remedios herbales, moxibustión, masajes y dietas, así como cambios en el estilo de vida, ejercicio (tipo yoga) y meditación. Las agujas de acupuntura permiten desbloquear y restablecer el flujo normal de la energía por los meridianos. Por ello, los tratamientos pueden ayudar a los órganos internos del cuerpo a corregir desequilibrios. La acupuntura en particular y la Medicina Tradicional China en general, pueden usarse como tratamiento de ayuda en los casos de endometriosis, síndrome del ovario poliquístico, recuento o movilidad baja de espermatozoides, etc. En algunos casos, un tratamiento de tres meses con acupuntura puede mejorar el pronóstico.
Este tipo de tratamientos tienen un notable porcentaje de éxito, con la ventaja añadida de que no sólo no tendrás efectos secundarios, sino que tu equilibrio general mejorará.
Tal vez si éstas ilusionadas futuras madres lo supieran, podrían ahorrarse toda una larga tortura y llegar al tesoro final de una forma mucho más natural y armoniosa. Disfrutando del proceso como se merece, que los niños crecen muy rápido y hay que dar tiempo al tiempo.
Sofía Manzaneque Suárez
Clínica Salud y Más
