Es probable que ante una lesión, dolor articular o muscular te hayas encontrado en la disyuntiva de tener que decidir a quíen acudir, fisioterapeuta, osteópata, kinesiólogo, pero, ¿no hacen todos lo mismo?. La respuesta es, NO.
En 1968 la OMS (Organización Mundial de la Salud) definió la fisioterapia como «el arte y la ciencia del tratamiento por medio del ejercicio terapéutico y agentes físicos como el calor, el frío, la luz, el agua, el masaje y la electricidad. Además, la fisioterapia incluye la ejecución de pruebas eléctricas y manuales para determinar el valor de afectación y fuerza muscular, pruebas para determinar capacidades funcionales, la amplitud del movimiento articular y medidas de la capacidad vital, así como ayudas diagnósticas para el control de la evolución»
La osteopatía por otra parte está referenciada por la OMS como un tipo de medicina tradicional, reconocida como medicina osteopática y que consiste en realizar una valoración diagnóstica y terapéutica de forma manual, de las disfunciones (alteraciones) de la movilidad articular y del tejido tisular en general,que pueden ser el origen o consecuencia de la aparición de enfermedades.
Lo menos conocido y también lo más cercano a nuestro tiempo, es la kinesiología aplicada, técnica desarrollada por un quiropráctico estadounidense, Dr. Goerge Goodheart, que descubrió una forma de evaluar, a través de la función muscular, disfunciones a nivel orgánico y músculo-esquelético, inter-relacionando la estructura con la función metabólica y la gestión de las emociones.
Seamos más prácticos, todas tienen en común la aplicación de técnicas manuales para ayudar a resolver alteraciones del sistema músculo-esquelético. En el resto todo es diferente.
La osteopatía junto con la kinesiología aplicada, relacionan las alteraciones músculo-esqueléticas con el resto del organismo, así, la osteopatía además de valorar la función articular y muscular, si existe un problema, buscará la relación a nivel orgánico y bionergético, basándose en que la alteración en la estructura, tiene relación directa con la función, por ejemplo, una alteración en la biomecánica de la pelvis, puede alterar la función del útero, de la misma manera que si una mujer acude a consulta con una disfunción en el útero, el osteópata evaluará su relación con la biomecánica de la pelvis.
La kinesiología aplicada evalúa el mismo problema músculo-esquelético, utilizando como herramienta el test muscular , evalúa el tono de los músculos, en respuesta a la aplicación de estímulos, que pueden ser visuales, olfativos, tacto, presión. El sistema nervioso interpreta dichos estímulos y responde a ellos a través del tono muscular, de esta manera se puede realizar una aproximación diagnóstica en cuanto al origen de la alteración, relacionando la disfunción con alteraciones metabólicas, orgánicas, emocionales y energéticas. Por poner un ejemplo, si a una persona le duele el cuello, el kinesiólogo comprobará el tono de un músculo, sea cual sea, si al presionar en una vértebra cualquiera del cuello, el tono del músculo, que antes era normal, ahora se encuentra debilitado, nos estará indicando que en esa vértebra y no en otra, existe una disfunción que puede ser la causa del dolor de cuello.
Si aún tienes dudas de qué terapia sería más efectiva para tí, te ofrecemos la posibilidad de beneficiarte de lo mejor de cada una de ellas, a través de nuestro tratamiento combinado de fisioterapia, osteopatía y kinesiología aplicada.
Nuestro tratamiento combinado consta de una primera sesión de una hora, combinando tratamiento fisioterapéutico y osteopático y una segunda sesión de media hora de kinesiología aplicada y osteopatía. El objetivo y el fin es el mismo, ayudarte a resolver el problema, pero desde una visión mucho más amplia, obteniendo un resultado mucho más eficaz y duradero.
En total son 90 minutos distribuidos en dos sesiones en días distintos. Si fuera necesario continuar con el tratamiento, ampliaríamos con otros 90 minutos, repartidos según necesidad. Hemos podido comprobar que este sistema de evaluación y tratamiento es más efectivo que los convencionales.
Ya no tendrás que acudir primero al fisio varias veces, después al kinesiólogo y estar haciendo un peregrinaje por distintas terapias. Ahorrarás tiempo y dinero
El tratamiento combinado tiene un coste de 65€.