Principio del Diagnóstico
El cuerpo humano es un conjunto de numerosas células que continuamente se están
desarrollando, dividiendo, regenerando y muriendo. Al dividirse las células se renuevan. En los
adultos, alrededor de 25 millones de células se dividen cada segundo y las células de la sangre se renuevan constantemente a una velocidad de aproximadamente 100 millones por minuto. En el proceso de división y renovación celular, las partículas con carga del núcleo y los electrones extranucleares; unidades básicas de una célula, se mueven sin cesar a altas velocidades,emitiendo ondas electromagnéticas ininterrumpidamente. Las señales de las ondas electromagnéticas emitidas por el cuerpo humano representan el estado específico de éste y por tanto, se emitirán señales diferentes dependiendo si el estado de salud es óptimo, débil, o grave. El estado de salud podrá ser analizado mientras que las señales de dichas ondas electromagnéticas puedan ser analizadas.
El Sistema Cuántico Bio-Eléctrico
El Sistema Cuántico Bio-Eléctrico es una nueva herramienta que analiza este fenómeno. La
energía y la baja frecuencia magnética del cuerpo humano se captan a través de un sensor, y a
continuación el equipo las amplifica y las analiza mediante el microprocesador que incorpora. Los datos se comparan con el espectro cuántico de resonancia magnética estándar de enfermedades y de nutrición, así como con otros indicadores incorporados en el equipo para diagnosticar si las formas de las ondas presentan irregularidades a través del uso de la aproximación de Fourier. De esta manera se puede realizar el análisis y diagnóstico del estado de salud y obtener los principales problemas del paciente, también como distintas propuestas estándares de curación o prevención, basándose en los resultados del éste.
El método de análisis cuántico de resonancia magnética es un emergente método de detección
espectral, rápido, preciso y no invasivo, lo que lo hace especialmente apropiado para la
comparación de los efectos de curación de diferentes medicinas y productos médicos, y para la
comprobación de posibles estados anormales de salud. Los principales elementos de análisis
ascienden a más de 30, e incluyen: la condición cardiovascular y cerebrovascular, la densidad
mineral ósea, los oligoelementos, la intoxicación por metales pesados, el reumatismo, los
pulmones y el tracto respiratorio, la nefropatía, el azúcar en la sangre, el sistema gastrointestinal, el hígado y la vesícula biliar, los nervios craneales, ginecología, próstata, enfermedad de los huesos, rastros de selenio, hierro, zinc y calcio, etc.
Es por tanto una herramienta enormemente útil que permite hacer una valoración global e integral del estado de nuestro organismo.